


La ciudad se encuentra a unos 4 kilómetros a la derecha del atraque, hay autobús desde el propio puerto.
Nuestros compañeros de mesa, ya no tenían ninguna excursión más reservada, por lo que a partir de este momento éramos 8 para desplazarnos.
Lo mismo nada mas bajarnos del barco, una inmensa flota de taxistas a la caza de los cruceristas, en esta ocasión optamos por una furgoneta para los 8, apenas regateamos y por 120 euros nos acercó a Kurion para ver sus ruinas greco-romanas, con parada en el Castillo y recorrido por los alrededores y por la ciudad de Limassol. El tiempo en esta escala es muy reducido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario